Fuente: Agencia de Noticias de la Universidad Nacional de Colombia.
Bogotá D. C., ago. 21 de 2012 – Agencia de Noticias UN- El país posee el 88% de géneros de palma de Suramérica y el 51% de las especies. Su gran diversidad incluye 44 géneros y 238 especies, lo que lo convierte en uno de los países más diversos.
Alrededor de 74 artículos científicos y 15 proyectos de investigación sobre palmas han sido ejecutados por los investigadores del Instituto de Ciencias Naturales (ICN) de la UN.
Por otra parte, el catálogo de estas plantas del país se encuentra actualizado gracias a la colección más importante de Palma de Cera que se conoce en el mundo, ubicada en Colombia.
“Ya no existe el impedimento taxonómico, hemos avanzado mucho en su estudio y vamos a seguir explorando más zonas del territorio. Ya construimos las bases del trabajo y ahora tenemos todas las herramientas”, afirma la profesora del ICN Gloria Galeano.
Asimismo, la especialista señala que continúan investigando su papel en los ecosistemas y sus usos. Estas metodologías son nuevas en Colombia y sirven para ofrecer más información con respecto a estas especies de palmas.
Cuidado sostenible
Aunque el país cuenta con cuatro de los cinco subgéneros que hay en el mundo, para la profesora Galeano, su conservación de Colombia no está asegurada.
“El 20% del total de las palmas de Colombia está bajo algún grado de amenaza. De las 33 especies endémicas del país, el 50% están amenazadas por extinción”, asegura.
Por esta razón, investigadores de la UN trabajan en diferentes proyectos relacionados con su cuidado y desarrollo sostenible. Las investigaciones no solo buscan su conservación, sino que pretenden conocer más sobre sus especies y describir sus usos.
Finalmente, los investigadores del Instituto buscan establecer sinergias con otras organizaciones y, a través de apoyo estatal, lograr estudiar un grupo que es muy importante para el desarrollo socioeconómico del país por su gran potencial. Según Galeano, ya está construida una base biológica de buena calidad, pero faltan más alianzas.
”Tenemos que aliarnos y hacer consorcios con otras áreas del conocimiento que incluyan a las palmas en los sistemas agroforestales. Así, lograremos desarrollar paquetes tecnológicos para extraer algunos de los productos que tienen mayor potencial industrial, como los azúcares y aceites”, concluye.