Fuente: Esta es una versión actualizada del artículo publicado en Razón Pública en este ENLACE.
Una tecnología que revolucionó los mercados globales y que también llegó a Colombia. Y sin embargo, el Estado no debió permitirla mientras no se descarte el riesgo de daños graves a la salud y el ambiente. Así lo han hecho muchos países*.
Héctor Herrera Santoyo @HectorH2_O** – Milena Bernal***
Una técnica distinta
El fracking, o fracturamiento hidráulico, es una técnica para la extracción de hidrocarburos que empezó a utilizarse en yacimientos convencionales de Estados Unidos en 1947, y en yacimientos no convencionales en 1977. Gracias a esta técnica ese país se ha convertido en el mayor extractor de hidrocarburos del mundo.
La forma más controversial del fracking se aplica en las capas de lutitas del subsuelo, conocidas en inglés como shale. En estas capas los hidrocarburos son más difíciles de extraer debido a su baja porosidad y permeabilidad. El fracking de lutitas requiere una perforación vertical de varios kilómetros, que se aísla mediante un tubo de acero revestido de cemento, por donde después saldrá el petróleo o el gas. Cuando la perforación vertical llega a su punto más profundo, se torna horizontal y atraviesa varios kilómetros de las formaciones de lutitas, donde los hidrocarburos están atrapados. Una vez hecha la perforación se procede a inyectar a muy alta presión, una mezcla de agua y arena (99 por ciento) junto con químicos tóxicos (1 por ciento), lo cual fractura las capas de lutitas y libera los hidrocarburos.
Medio ambiente y salud publica
Residuos contaminados producto del fracking son arrojados a un pozo sin aislante en California. Foto: Faces of Fracking |
El fracking ha despertado intensos debates por sus posibles impactos sobre el medio ambiente y sobre la salud pública. Por eso tanto organizaciones ambientalistas como asociaciones petroleras, autoridades gubernamentales y universidades han adelantado numerosas investigaciones acerca de esta práctica.
En 2014 el Consejo Canadiense de Academias de la Ciencia publicó un informe sobre sus impactos ambientales, y en octubre de este año la Sociedad de Profesionales de la Salud de Nueva York publicó un compendio exhaustivo de los efectos y riesgos del fracking para la salud pública.
Gracias a esta técnica ese país se ha convertido en el mayor extractor de hidrocarburos del mundo.
El principal riesgo consiste en que el fracking podría afectar fuentes superficiales y subterráneas de agua, pues esta técnica requiere una gran cantidad de ella, especialmente en su fase inicial, cuando la mezcla se inyecta para fracturar las capas de lutitas. Parte del agua inyectada vuelve a la superficie, donde debe tratarse y almacenarse para evitar que contamine cuerpos de agua superficiales. Igualmente, los pozos de fracking atraviesan reservorios subterráneos de agua (acuíferos), y si eventualmente se dan filtraciones del pozo, estos reservorios podrían quedar contaminados. En un video reciente, una mujer argumenta ante el Departamento de Protección Ambiental de Pennsylvania que su agua fue contaminada por actividades de fracking aledañas.
Por otra parte, en junio de 2015 la revista Science publicó evidencias de la relación entre la inyección hidráulica en pozos y una actividad sísmica por encima de los niveles habituales.
Fracking y cambio climático
Según algunos investigadores, el gas metano o natural (CH4) produce menos dióxido de carbono (CO2) al quemarse y tiene mayor eficiencia energética que otros combustibles fósiles. Por esto consideran al gas natural como la opción “menos mala” y como un “combustible puente” hacia una matriz energética basada en combustibles renovables.
Dado que la aplicación del fracking aumenta considerablemente las reservas de gas natural, ya se oyen voces que consideran esta técnica como una estrategia adecuada contra el cambio climático. Pero Anthony Ingraffea, profesor de la universidad de Cornell, ha documentado casos de metano fugitivo (metano filtrado a la atmósfera desde pozos de fracking); este fenómeno es de especial gravedad porque el metano es un gas con un impacto de cambio climático 25 veces superior al del dióxido de carbono, según la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos. En consecuencia hay que zanjar este debate científico antes de adoptar decisiones en las actuales negociaciones sobre cambio climático.
Prohibiciones y moratorias
Preocupados por la protección del ambiente y la salud pública, varios Estados han prohibido de plano o han declarado la moratoria del fracking. El cuadro siguiente describe algunos ejemplos.
Prohibiciones y moratorias de fracking en el mundo | |
Francia | Prohibición en 2011 mediante la ley 2011-835 ; en 2013 el Tribunal Constitucional ratificó esta ley (Decisión 2013-346). |
Estado Nueva York, Estados Unidos | Prohibición en 2015, con fundamento en el estudio adelantado por el Departamento de Salud Pública de Nueva York. |
Argentina | Más de 30 municipios han expedido ordenanzas de prohibición o moratoria. |
Bulgaria | Prohibición del 18 de enero de 2012: en consecuencia el gobierno revocó un permiso de gas de esquisto a la empresa Chevron. |
Escocia | Moratoria indefinida declarada en enero de 2015. |
Holanda | Moratoria declarada en 2015. |
Estado de Maryland, Estados Unidos | Moratoria en la formación “Marcellus”. |
Quebec, Canadá | Moratoria declarada en 2011. |
Por fuera de Estados Unidos, el mayor sitio de explotación de fracking se encuentra en Vaca Muerta, Provincia de Neuquén, Argentina También existen varios grandes bloques con permiso para fracking en México y en Brasil.
La siguiente infografía de la Alianza Latinoamericana Frente al Fracking resume los impactos y resistencias ante esta técnica.
En Colombia
La Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) ya ha otorgado permiso para el uso de fracking en seis bloques de hidrocarburos no convencionales en el Magdalena Medio, y expresó públicamente su interés de promover esta técnica para disminuir la dependencia de yacimientos convencionales.
Bloque | Proceso competitivo | Estado |
CAT 3 (E&P) | Ronda Colombia (RC) 2012 | Fase 1 – En Ejecución |
VMM 5 (E&P) | RC 2012 | Fase 1 – En Ejecución |
VMM 16 (E&P) | RC 2012 | Fases 1 y 2 Unificadas – En Ejecución |
VMM 29 (E&P) | RC 2012 | Fase 1 – En Ejecución |
COR 62 (E&P) | RC 2012 | Fase 1 – En Ejecución |
VMM 9 (E&P) | RC 2014 | Fase 1 – En Ejecución |
Sin embargo para el manejo de estos sitios sería necesario que las autoridades ambientales y del sector petrolero estén bien coordinadas y garanticen que los bloques de hidrocarburos no convencionales no se superpongan con áreas de especial protección ambiental, como parques naturales, reservas forestales, páramos o cuencas hídricas abastecedoras.
Igualmente, el gobierno deberá garantizar el derecho a la consulta previa si uno de estos bloques afecta un territorio colectivo de grupos étnicos.
Mediante Resolución 180742 de 2012, el Ministerio de Minas y Energía estableció los procedimientos para la exploración y explotación de yacimientos no convencionales, incluido el fracking. Asimismo, mediante el Decreto 3004 de 2013 este Ministerio ordenó expedir las normas técnicas y procedimientos en materia de fracking y yacimientos no convencionales, las cuales se publicaron en la Resolución 90341 de marzo de 2013.
El Decreto 3004 define como yacimiento no convencional “la formación rocosa con baja permeabilidad primaria a la que se debe realizar estimulación para mejorar las condiciones de movilidad y recobro de hidrocarburos”. Según el mismo decreto estos yacimientos incluyen “gas y petróleo en arenas y carbonatos apretados, gas metano asociado a mantos de carbón (CBM), gas y petróleo de lutitas (shale), hidratos de metano y arenas bituminosas”.
El fracking ha despertado intensos debates por sus posibles impactos sobre el medio ambiente y sobre la salud pública.
Tanto el gobierno como el presidente de Ecopetrol Juan Carlos Echeverry le han dado su apoyo al fracking. Este último dijo que “no podemos darnos el lujo de no hacer fracking”. Por su parte el ministro de Minas y Energía aseguró que las ganancias del fracking servirán para financiar parte de la paz y el postconflicto.
Principio de precaución
Otro debate alrededor del fracking en Colombia se refiere a si debe declararse la moratoria en virtud del principio de precaución.
Este principio consta de dos elementos: la posibilidad de un daño ambiental grave e irreversible, y la falta de certeza científica absoluta sobre el carácter inocuo de la actividad en cuestión. Cuando estos dos elementos concurren el Estado debe adoptar medidas eficaces para impedir la degradación del ambiente.
En el ordenamiento jurídico colombiano el principio de precaución es obligatorio (Ley 99 de 1993, Sentencia T-299 de 2008 de la Corte Constitucional, Convenio de Diversidad Biológica y Convención Marco de Cambio Climático).
Como dijimos arriba, ya hay evidencia científica suficiente para concluir que el fracking podría ocasionar un daño ambiental grave e irreversible, y los estudios disponibles no han comprobado que esta técnica sea inocua para el medio ambiente y la salud pública. Por lo tanto se cumplen ambos elementos del principio de precaución y el Estado colombiano debe adoptar medidas eficaces de protección.
Más precisamente, el Estado debe declarar la moratoria sobre el fracking hasta tener la certeza científica sobre la inocuidad de esta técnica y sobre la capacidad de controlar sus efectos negativos para el ambiente y la salud pública.
*En este sitio web puede encontrarse una relación completa de los documentos científicos y jurídicos referenciados en este artículo, y documentos adicionales.
**Miembro de la Asociación Interamericana para la Defensa del Ambiente (AIDA), coordinador de la Red por La Justicia Ambiental, abogado de la Universidad de los Andes y magíster en Políticas Públicas de la Universidad Nacional de Colombia. @hectorh2_o
***Abogada de la Universidad Católica de Colombia con maestría en Derecho Ambiental de la Universidad Complutense de Madrid, España, coordinadora del área de cambio climático, comunidades forestales, mecanismos de mitigación y adaptación en la Asociación Ambiente y Sociedad.