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kumanday

Reunidos el 17 de noviembre de 2015 en Territorio Kumanday, Manizales, Colombia, personas, colectivos y grupos tejimos pensamientos y palabras en torno a la situación de la crisis climática actual. Reflexionamos acerca de los factores asociados al Cambio Climático, cómo estos afectan nuestra vida cotidiana y compartimos nuestras acciones para afrontar este fenómeno. Fue así como a partir de esta reunión cocreamos la presente Declaración en la que se reflejan las dificultades presentes en el Territorio Kumanday, las alternativas que se vienen construyendo y nuestras pretensiones para caminar hacia un Buen Convivir como opción a la crisis climática.

La crisis climática en el contexto de la crisis civilizatoria

Las inundaciones, los deslizamientos, los ciclones, los huracanes, los tifones, los tsunamis y las sequias son eventos que se han intensificado en las dos últimas décadas como efectosdel cambio climático. Estos eventos vienen afectando la alimentación, la vivienda, el acceso al agua, el ambiente sano, la salud, el trabajo y la vida misma tanto de humanos no humanos .

Nos preguntamos: ¿este cambio climático a qué se debe? Y hemos acertado que el cambio climático que estamos viviendo en la actualidad tiene relación con la crisis civilizatoria generada y acentuada por el paradigma de la civilización occidental.

Decimos crisis civilizatoria, en tanto este paradigma ha sentado las bases de una civilización del Desarrollo, un ‘desarrollo’ que promueve la gran industria, la extracción de bienes naturales a gran escala, la explotación humana, el fomento de guerras por acceso a petróleo, a agua, a bosques, a suelos… y así el paradigma occidental ha cimentado el ‘desarrollo’ en la alteración de los ciclos biogeoquímicos del planeta ocasionando lo que hoy conocemos como intensificación del ‘efecto invernadero’ debido a las altas emisiones de gases de efecto invernadero como dióxido de carbono, metano, óxidos de nitrógeno, clorofluorocarbonos y otros. Todas estas emisiones han sido generadas por las grandes industrias ubicadas en los países que así mismo se hacen llamar ‘desarrollados’.

Si bien el clima de nuestro planeta, de ‘nuestra casa común’, de nuestra ‘pachamama’ cambia constantemente y de forma natural, el accionar de las industrias, de las corporaciones multinacionales, de los países altamente industrializados y extractivistas ha afectado tanto que cada día podemos evidenciar un cambio ambiental global que se expresa en daños ecológicos, daños que generalmente padecen las personas y países del sur global.

De este modo, la crisis climática que enfrentamos no corresponde a un problema técnico sino a un problema social, político y económico en lo que concierne a las dinámicas macro, y a nivel micro. En lo cotidiano la crisis climática corresponde a un asunto cultural, de educación, de saber habitar y saber convivir en ‘nuestra casa común’.

Ante la crisis climática exigimos justicia ambiental y climática.

En este sentido reconocemos que la crisis climática no es una responsabilidad de la humanidad en su conjunto, por el contrario es responsabilidad de quienes sustentan una forma concreta de desarrollo económico, político y social.

Por ello nuestro llamado es a la justicia ambiental y climática, a que los gobernantes, las grandes industrias y las corporaciones multinacionales asuman la deuda climática que tienen con el planeta, a que dejen de emitir gases de efecto invernadero, a que dejen de contaminar y dañar los bienes comunes naturales. Queremos dejar en claro que si bien se vienen fomentando alternativas energéticas, rechazamos las que promuevan el acaparamiento de las aguas, del suelo, de los bosques, de los ecosistemas, el desplazamiento de poblaciones de sus territorios sólo para alimentar la ‘economía verde’, esas son falsas soluciones al cambio climático!!!.

La justicia que exigimos para la COP 21 en Paris, Francia, es una justicia basada en la responsabilidad de estos agentes, para que así compensen el daño hecho, para que cambien sus formas de producción, para que promuevan políticas que reduzcan las vulnerabilidades, para que promuevan acciones de adaptación, de fortalecimiento de la resiliencia, para que respeten los derechos universales de la Madre Tierra.

Nuestras propuestas de Buen Convivir.

Creemos que todxs podemos hacer parte del cambio, podemos cocrearlo!

Los gobiernos, organizaciones, colectivos y persona a nivel local, para nuestro caso los que hacemos parte del Territorio Kumanday (Manizales, Villamaría, Neira y Pensilvania) pueden y podemos asumir las siguientes acciones de Buen Convivir frente al Cambio Climático:

  1. Incluir las zonas de mayor afectación por factores asociados al cambio climático y la variabilidad climática, así como las zonas propicias para acciones de adaptación en los Planes de Ordenamiento Territorial, en las Agendas Ambientales Regionales, en los Planes de Acción Integral y en los Planes de Desarrollo Municipal.
  2. Generar políticas de atención y prevención frente a las poblaciones humanas en riesgo de desplazamiento por factores asociados al cambio climático y la variabilidad climática.
  3. Promover alternativas energéticas que respeten las diversas manifestaciones de la vida. Y a su vez rechazar las centrales hidroeléctricas, los monocultivos de caña y de palma de cera, las centrales eólicas y la geotermia que afectan dinámicas ecosistémicas, pueblos y territorios.
  4. Expropiar o comprar predios de carácter privado como bosques o cuencas en beneficio del bien público.
  5. Incentivar la recolección de aguas lluvias.
  6. Implementar prácticas y políticas para el restablecimiento de las aguas residuales y su buen manejo.
  7. Declarar las aguas como bien público y gratuito.
  8. Implementar la normatividad de regulación y protección los páramos, reservas, cuencas, bosques y ecoparques.
  9. Generar sistemas de siembra integral o permacultura.
  10. Incrementar la siembra de especies de flora nativas fuera de los cánones de la venta de bonos de carbono que fomentan la financiarización de la naturaleza.
  11. Estimular a los campesinos, los sistemas agroecológicos, la seguridad alimentaria rural y urbana.
  12. Aplicar la normatividad que regula la contaminación atmosférica generada por el sector de transporte basado en combustibles fósiles.
  13. Incentivar y promover transportes como la bicicleta.
  14. Comenzar a cambiar hábitos de consumo que impliquen una alta huella ecológica, o que tengan relación con producción de combustibles fósiles por ejemplo plástico .
  15. Promover espacios educativos para cocrear alternativas de adaptación a nuestro hogar planeta.
  16. Recordar y reconocer los saberes ancestrales de sociedades rurales que aporten al Buen Convivir socioambiental.
  17. Legitimación de autoridades tradicionales espirituales con sentipensares afines a la conservación de la Madre Tierra.

  Agenda para caminar hacia el Buen Vivir

Firmamos, el 17 de noviembre de 2015 en Territorio :

 Catherine Gómez. Escuelas de vida y Partido Alianza Verde

 Susana Velásquez. Corpocaldas

 Diana Patricia Latorre Niño, Luisa Fernanda Gutiérrez, Ignacio Guarnizo Velázquez. Pacto Mundial Consciente Ikwachenduna

 Sorany Franco Pérez. Fundación Pensilvania

 Lorena Henao Ángel. Prodiversitas Colombia.

 Luz María Chávez Echeverry. Iniciativa Colombiana mujeres por la paz

 Enrique Arbeláez Mutis. Federación de ONG’S ambientalistas de Caldas.

 Erika Muñoz Villarreal. Grupo de estudios jurídicos y sociojurídicos de la Universidad de Caldas, Pacto Mundial Consciente y Freskiemos el ambiente.

 Alejandra Gutiérrez. Ciudadana.

 Javier Gonzaga Valencia Hernández. Clínica Sociojurídica de interés público. Universidad de Caldas.

Patricia Botero-Gómez. Profesora Universidad de Manizales. Participante del Tejido de colectivos por la Comuna San José; Creapaz; comunidad Gallinazo por el Buen vivir de la montaña; Colectivo minga del pensamiento en defensa y liberación de la madre tierra; Campaña hacia otro pazífico posible por la paz como la sentipiensan los pueblos negros, afrodescendientes, palenqueros y raizales en rexistencia.

Natalia Giraldo Jaramillo. Antropóloga, Magíster en Áreas Silvestres y Conservación de la Naturaleza, Centro de Estudios Kumanday.

Juan Sebastián Blandón Rendón. Escuelas de Vida.

Marcela Gómez. Bióloga.

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