Fuente: KienYKe.com
Colombia perdió 295.892 hectáreas de bosque natural durante los años 2011 y 2012, territorio que equivaldría a 1,6 veces el área total del departamento del Quindío.
Las principales causas son la expansión de la ganadería extensiva, la expansión de frentes de colonización, los cultivos de uso ilícito, particularmente de coca, así como la tala y la minería ilegal. La región más afectada sigue siendo la Amazonía, especialmente los departamentos de Caquetá, Meta y Guaviare, que concentran el 46 por ciento de la perdida de bosque del país. Aunque en la última medición para el 2011-2012, la deforestación disminuyó en esta región cerca de 10 mil hectáreas anuales.
La reducción en la tasa de deforestación está en cerca de 90 mil hectáreas por año, lo que equivale a un 39 por ciento menos comprado con el periodo 2005-2010. Aunque muestra que la tasa promedio anual sigue siendo alta.
La reducción coincide con una disminución muy significativa de los cultivos de coca, particularmente en los Departamentos de Nariño y Cauca, y con el incremento de los esfuerzos interinstitucionales para el control de la tala y la minería ilegal.
También se han emprendido esfuerzos para la reducción de la frontera agropecuaria y se han apoyado iniciativas para incentivar una ganadería sostenible que reduzca la pérdida de bosque natural en cerca de 70 mil hectáreas en varias regiones del país.
En general, la cifra promedio anual de deforestación ha disminuido en buena parte del país, salvo en Guaviare y Arauca, donde en estos dos últimos años ha aumentado cerca de 11 mil hectáreas y 7 mil hectáreas respectivamente.
Por otro lado, en la región Caribe la tasa promedio de deforestación anual del 2011 y del 2012 se redujo. Sin embargo, vale la pena aclarar que esta región es la que menor cobertura boscosa tiene del país, la cual representa tan solo el 3 por ciento del total de cobertura nacional con cerca un millón ochocientas mil hectáreas.
El sistema de monitoreo, que fue creado por científicos colombianos, permite combinar alertas tempranas cada seis meses y cuantificar de manera precisa cada dos años, la superficie total deforestada a nivel regional.
El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (IDEAM) y la fundación Gordon y Betty Moore, están vinculadas a esta medición.